Destellos sobre la superficie rojiza del tejado
Luz color atardecerverderosa
Ese horizonte que no siempre se ve
Luz blancaplateada del elevador
Ventanas que nos observan
Voces que dibujan fantasmagorías que se convierten en imágenes
Reflejos que se absorben a través de las pieles
Piel de edificio
Piel de ciudad
Piel de nuestra piel
Salir de un cuerpo para entrar en otro
Atravesamos la calle
Subimos escaleras
Entramos en el hotel
Los hoteles de acá y allá
Los hoteles de mis películas favoritas
Habitación 5
Habitación 33
Habitación 15
Los impares atándose entre sí
Entrar en la oscuridad
Entrar en el recuerdo
¿Cuántas habitaciones de hotel, a oscuras, caben en mi imaginación?
Dulceoscurahabitación
Esta habitación nos espera
Nos envuelve
Nos lleva a un adentro
Al recuerdo, a la memoria
5:55 de la madrugada
Cuando la noche y el día se encuentran
Orificios donde se escapa la luz
¿Amanece o anochece en esta habitación de hotel?
Una pausa en la que no sabemos dónde comienza y termina el deseo
Contenidas
Una ventana abierta
El doble de su doble
Pliegue
Reflejos
Destellos
Bruma
Y después del crepúsculo, la oscuridad, otra vez.
Quizás se trate de una de las propuestas más emocionante de la artista Sofía Motenegro, que consigue vincular las intensidades de un viaje conceptual, emocional y potentemente estético.

















